Cincuenta mil personas asistieron a las celebraciones por el 93º aniversario de la Revolución Socialista de Octubre, ocurrida en Rusia, y que iniciara una ola revolucionaria por todo el planeta, una ola que organizó a la clase obrera, y que dotó a la misma de la ideología marxista, para acometer la toma del poder político y económico, que viera, y sigue viéndolo lamentablemente, en manos de la avariciosa elite burguesa. El 25 de octubre de 1917 se produjo el triunfo de la insurrección obrera popular de Petrogrado, la entonces capital de Rusia, que en aquel momento estaba regida por un gobierno provisional burgués, que intentó hacerse del poder y de la revolución que en febrero había depuesto al Zar Nicolás II. El líder comunista bolchevique Vladimir Lenin planteó la futilidad de una "necesaria transición" de un régimen burgués a uno socialista, una vez derrocado el absolutismo monárquico zarista. Él confió en el potencial revolucionario y en el poder de los proletarios armados. También en la clase campesina que se adhirió a la revolución, que se alió a la clase conductora de la revolución, los proletarios. Una revolución que comenzó siendo democrático-popular, y que condujo a la liberación de la clase obrera, ¡quién lo diría!, ¡cuántas veces los trotskistas nos versearon con que el socialismo significa siempre una irrupción violenta!. La revolución armada, cuando el contexto así lo permite, es la única salida, y el carismático Lenin, así lo entendió, y aplicó, armando y organizando a los obreros rusos y a sus aliados campesinos.
La historia ha demostrado, desde esa victoria, que el socialismo ha sido superior al capitalismo, que no ha fallado, que no es incompatible con el "ser humano", como arguyen los señoritos liberales y la progresía. Miremos sino, qué ha pasado con Rusia, con Rumania, con Polonia, con Hungría, veinte años después de la desintegración del bloque socialista. En una combinación de acciones "indirectas" pero certeras inflingidas por los capitalistas de Estados Unidos y Europa Occidental. Las operaciones de inteligencia, de desgaste, de guerra sucia, derribaron al socialismo, ayudado por una sarta de burócratas traidores que habían comenzado a parasitar en las cúpulas de los partidos comunistas. Baste mencionar a Gorbachov, el hacedor de la Perestroika, prácticamente una capitulación ante el capitalismo, seis años antes de la debacle definitiva, de un estado, el de la gran Unión Soviética, que estaba carcomido por la corrupción y el arribismo político. Los errores mayúsculos de muchos dirigentes que quizás hayan sido socialistas, y en cierto modo, hayan también adherido a ese "socialismo real" de buena fe, terminaron por ayudar a la decadencia y la implosión de un conglomerado de naciones que fue ejemplo de fraternidad para todo el Mundo.
--------------------------------
¡LENIN, STALIN, VICTORIA!
Unas 50.000 personas se dieron cita en el Teatro Pushkin de Moscú, y en la calle Tverskaya, para homenajear a los revolucionarios del 25 de octubre de 1917 (7 de noviembre, en el calendario gregoriano). Consignas como "Gran Revolución de Octubre- Gracias", "Por la amistad de los pueblos y los trabajadores" y "Viva la Revolución Socialista", fueron las más frecuentes en las voces y en las pancartas de los militantes del Partido Comunista de Rusia, y sus aliados, que marcharon por las calles de Moscú, una vez más como todos los años, para demostrar que el socialismo no es cosa de antaño, que su ideología permanece vigente, y que Rusia jamás recuperará la prosperidad ni la grandeza perdida bajo el actual régimen.
Hubieron, también, consignas de solidaridad con la República de Bielorrusia, antigua integrante de la URSS, que ha comenzado a recuperar la senda del socialismo y hoy se ve amenazada por el escudo antimisiles que Obama y compañía quieren instalar en Europa del Este, hoy convertida en un bastión de colonias proyanquis. Rusia, ahora promocionada como parte del BRIC de Goldman Sachs, es un bastión de las mafias y de pobreza. Muy lejos de lo que fué en las décadas de los años 50, 60, 70. Un país que le daba vivienda, salud y educación plenamente gratuitos a toda su población, y de excelente calidad. Un país donde, a pesar de las burdas y falaces acusaciones de ser un reino de la miseria, poseía su propio programa espacial, muy adelantado a los restos que hoy quedan en Rusia del mismo.
FOTOS DE LA MANIFESTACIÓN QUE SE DIO EN EL DÍA DE HOY EN MOSCÚ
Impresionante manifestación del pueblo soviético, con el Teatro Pushkin al fondo |
Ofrenda floral en homenaje el camarada Stalin |
Ofrenda floral al mausoleo del camarada y Maestro, Vladimir Lenin |
Guennadi Zyuganov, secretario general del PCFR, dando un discurso durante el mitin |
Ancianos, niños, jóvenes. El socialismo sigue tan vigente y actual como hace 93 años. |
La primera columna, por la calle Tverskaya |
Y cómo será de justo el socialismo, que nunca hará una revolución sucia, o una caricatura de revolución.
No hay comentarios:
Publicar un comentario